No pasó ni una semana desde el último aumento, que se registró el pasado viernes.

 En Argentina, la petrolera Shell elevó los precios de la gasolina en un promedio de 37 por ciento, afectando a una amplia gama de tipos de gasolina, después de anunciar una devaluación del peso argentino frente al dólar este martes, 72 horas antes de la toma de posesión del presidente de extrema derecha Javier Miley.

El aumento elevará el precio de la gasolina en Argentina a unos 800 pesos, y se espera que otras compañías petroleras sigan el ejemplo con aumentos de precios similares en el futuro.

Fuentes del mercado petrolero indican que la primera en sumarse a esta medida será la estatal YPF, el actor principal en el mercado, que podría aplicar un aumento comparable al de Shell.

Inmediatamente después del anuncio de Shell, algunas estaciones de servicio de YPF en la Capital Federal dejaron de vender tanto la nafta Súper como la Premium, alegando que se habían agotado debido a la alta demanda generada por la noticia.